La práctica del buceo es una de las experiencias más maravillosas que puedes experimentar. La diversidad de fauna y flora marina que logramos apreciar durante una inmersión, son realmente espectaculares. Quienes practican esta actividad subacuática deben cuidar de la mejor forma posible todo su equipo de buceo.
La parte más maravillosa de poder realizar submarinismo, es observar todo ese gran mundo que se encuentra bajo el agua: sus especies, plantas, distintas formas de vida, colores y mucho más. La visión del buzo es fundamental al momento de una inmersión, por esto te dejaremos estos consejos para que puedas cuidar tus gafas y evitar el deterioro con el paso del tiempo.
Mantenimiento de las Gafas de Buceo
Como cualquier otro implemento que uses para la práctica de este deporte, las gafas de buceo también necesitan de un cuidado especial. Si bien están elaboradas con excelentes materiales, también suelen ser algo frágiles.
El mantenimiento que debes realizarle no es muy complicado. Solo necesitas algo de tiempo para limpiarlas a profundidad antes y después de una inmersión, para que estén optimas en todo momento.
En las tiendas de buceo venden distintos productos especiales para el cuidado y limpieza de las máscaras, sin embargo, hay otras opciones que puedes utilizar como lavarlas con agua dulce, jabón, cloro e incluso toallas húmedas. También puedes utilizar cepillos muy suaves para eliminar las sales, polvo o cualquier sustancia de las gomas, y algodón o pañuelos para el vidrio.
A continuación te dejaremos los siguientes consejos para mantener tus gafas de buceo:
- Asegúrate de no golpearlas. No las dejes caer de forma abrupta.
- No las guardes junto al resto del equipo de buceo y no coloques objetos pesados encima.
- Si llevas algún tiempo sin usarlas, límpialas. Pueden tener bastante polvo, hongos o moho.
- No dejes que el vidrio tenga contacto con las gomas, esto puede causar daños en el lente.
- Luego de una inmersión, lávalas con agua dulce y no las guardes si siguen húmedas.
- No dejes el lente bajo la exposición del sol o luces altas.
Cuidado con la sal
Las sales del mar son el peor enemigo de las gafas de buceo y en general, de todo el equipo que se utiliza en el submarinismo. Si no limpiamos de forma adecuada los implementos luego de una inmersión, seguramente con el paso del tiempo comenzarán a dañarse. Si dejas que el agua se seque, la sal quedará adherida a los equipos, poco a poco hará que las gomas y plásticos pierdan elasticidad, se agrieten y rompan.
Además, si cuentas con algún accesorio de metal, puede llegar a oxidarse. Claro está que esto no pasará a las horas ni a los días, pero notarás que la vida útil de tu equipo de buceo, será mucho menor.
Para evitar esto se recomienda que después de la inmersión laves muy bien todos tu equipo, incluyendo la máscara de buceo, con agua dulce para remover toda el agua salada. Luego límpialo y esperar a que se seque por completo.
Cuidado con el sol
¿Quieres que tus gafas de buceo duren por mucho tiempo? Pues no la dejes bajo la exposición solar.
Los rayos ultravioletas UVA y UVB del sol no solo afectan la piel, también a distintos tipos de materiales. Pueden ocasionar que el vidrio cambie un poco su totalidad, dificultando la visibilidad en las inmersiones.
Además, al recibir los rayos solares por un tiempo prolongado, las gomas, siliconas y plásticos de la máscara de buceo, se expanden, luego pierden su elasticidad y terminan rompiéndose.
En recomendable resguardar las gafas bajo la sombra, en un sitio donde no tengan una exposición constante con ningún tipo de iluminación directa.
Revisa cada cierto tiempo el material
En su mayoría, las gafas de buceo están compuestas por distintos materiales como:
- Cristales
- Gomas
- Plástico
- Metal
- Material de caucho
- PVC
- Neopreno
Estos materiales están integrados en distintas partes de la máscara como el lente, macro correa, hebillas y puente de la nariz. Antes y después de la inmersión, se debe revisar para descartar cualquier tipo de daño que haya podido sufrir, o un posible deterioro y saber si debes reparar, o las gafas ya cumplieron su tiempo útil.
Elimina los hongos
Es esencial que al salir del océano laves bien la máscara con suficiente agua dulce para eliminar las sales. Deja que se seque completamente y luego guárdala. Si al hacer este último paso las gafas siguen mojadas, probablemente conseguirás hongos o moho en ellas cuándos quieras utilizarlas de nuevo. También evita dejarlas en espacios donde haya humedad, ya que tendrás el mismo resultado.
Para eliminar el hongo y el moho, puedes llenar un recipiente con agua, agrégale cloro, jabón u otro producto que sirva para esto. Posteriormente sumerge la máscara por un par de horas. Al sacarla, frótala con un cepillo, deja que seque y completa el trabajo pasándole un pañuelo.
Cuida los cristales
Para mantener los cristales en buen estado por el mayor tiempo posible, se recomienda que no los dejes bajo la exposición del sol u otras luces, de forma directa. Sé muy cuidadoso al lavarlos y no uses químicos que afecten el vidrio templado.
Cuando estés en la playa, no los pongas sobre la arena ya que pueden rayarse. Lo mismo pasa si los dejas sobre una superficie inestable. Recuerda: sería terrible perder la oportunidad de disfrutar de las maravillas del mar por no cuidar nuestras gafas.
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